Practicar el cruising puede llevarte a situaciones algo extrañas y difíciles.
El cruising gay ha sido uno de los pasatiempos más populares en la cultura gay. Ciertas aplicaciones hacen que el cruising sea un poco más fácil hoy en día, pero un buen paseo por el bosque que termine en sexo es una fantasía que todos queremos experimentar al menos una vez.
Por más excitante que pueda ser el cruising, también hay momentos en los que puede ser poco placentero o incluso un poco peligroso. Aquí hay algunos momentos incómodos que puedes encontrar si alguna vez estás practicando cruising.
Coquetear con alguien que no está en plan de cruising
Lo creas o no, hay gente que simplemente sale a disfrutar de la naturaleza. Incluso si estás en un lugar conocido por el cruising gay dentro de la comunidad, eso no significa que todos sepan lo que sucede allí. Acércate con cautela y asegúrate de saber cómo interpretar el ambiente para evitar este encuentro incómodo.
Leer mal las señales
Es posible que sepas con certeza que esta persona está aquí para hacer lo mismo que tú. Es posible que incluso la hayas visto en acción y que eso sea una razón para que estés interesado. Es posible que incluso entable una conversación contigo y que pienses que le interesa, hasta que no sea así. Esto puede resultar incluso más incómodo que confundir sus intenciones de ligue en primer lugar, pero sigue adelante y no dejes que eso te desanime.
Encontrarte con alguien a quien conoces
Por supuesto, esto puede pasar en cualquier lugar. Pero digamos que te encuentras con un ex, o un compañero de trabajo al que preferirías no ver teniendo sexo, o cualquier otra cosa. Es posible que no quieras que las personas de tu círculo íntimo sepan que haces cruising. Puedes elegir reconocerlos o no si te sientes raro a su lado, pero al igual que lo harías en un club o en una tienda de comestibles, muévete a otra sección y espera hasta que se vayan.
Ser sacado del clóset
Ampliando el punto anterior, también existe la posibilidad de que no quieras que la gente sepa que tienes sexo gay. Hay muchos hombres heterosexuales que van a escondidas de sus esposas/novias/quien sea solo para estar allí, lo que a menudo es la mitad del atractivo para los hombres gays que también van. Pero si temes que alguien te reconozca, también puedes tener miedo de que te saquen del clóset.
El otro chico quiere hacer cosas muy extrañas
En primer lugar, no hay que humillar a otros por sus fetiches, después de todo, todo el mundo está allí para explorar algún tipo de fantasía. Ya sea sexo al aire libre, el riesgo de que te descubran o para explorar algunos intereses incipientes, el cruising siempre atrae a una determinada clientela. Probablemente tú también seas bastante pervertido si estás en el bosque, pero a veces la gente simplemente te pide cosas raras. Esto puede pasar en cualquier situación sexual, pero existe una sensación añadida de vulnerabilidad al hacer algo que quizá no te guste del todo cuando estás expuesto a los elementos.
Ser grabado
Hoy en día, hay muchos creadores de contenido y los lugares de cruising son lugares privilegiados para grabar material para OnlyFans, JustforFans o cualquier otra plataforma. Aunque no se puede publicar nada sin tu consentimiento (prepárate para firmar una exención de responsabilidad si no tienes una cuenta propia), es posible que te encuentres con muchos creadores en tu viaje de cruising que al menos quieran grabar para su «colección personal». A partir de ahí, la elección es tuya.
Encontrarse con alguien que no esté “preparado”
Muchos hombres que están haciendo cruising lo están probando por primera vez, e incluso puede que sea la primera vez que tengan sexo con otro hombre. Independientemente de su experiencia sexual, la persona que será el pasivo puede no estar tan preparada como podría esperarse. Usar condones mientras se está haciendo cruising puede al menos ayudar a que esto sea un poco menos incómodo.
No estar preparado tu
Además de la posibilidad de no estar limpio, también es posible que te quedes sin lubricante, quieras condones y no los tengas, o tengas sed y hayas olvidado tomar agua. Cada vez que salgas de cruising, trátalo como si fueras a una primera cita con alguien con quien quieres tener una relación duradera para asegurarte de que siempre estés listo para cualquier cosa.
Ser atrapado
La idea de que te atrapen es parte del atractivo del cruising para muchos hombres. Si te atrapa la policía, es probable que te arresten por tener sexo en público, incluso si ambos son mayores de 18 años. Si vives en uno de los estados (o países) que aún tienen delitos penales contra la sodomía, podrías tener muchos más problemas de los que merece la pena.
Estar en peligro genuino
Es importante estar seguro y protegerse en todo momento. Hay muchas personas que atacan a la comunidad LGBTQ+ a propósito. También hay innumerables historias sobre personas que recibieron palizas o algo peor cuando estaban practicando cruising, así que, aunque no sea una idea tan divertida, lo enfatizaré una vez más: ten cuidado. Conoce tu entorno, ten protección y cuídate.
Fuente: Pride
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